Yoga Nidra

Por Valérie Dana

Ilustraciones por Rubén Moreno

Yoga. Nunca se ha hablado tanto de esta filosofía y disciplina ancestral. Desgraciadamente hoy en día ha perdido mucha de la fuerza que tenía por culpa del marketing. Se va a una clase de yoga como se acude a otra de spinning. Y no es así. Mirarnos al espejo para que nos diga que somos estupendas no tiene sentido porque la esencia de esta práctica es conectar la mente con el cuerpo, es decir, que sabremos si nuestra postura es correcta escuchando y sintiendo nuestro cuerpo.

El yoga es un conjunto de asanas (posturas) y respiración cuyos beneficios son numerosos. Que cada uno encuentre el suyo es lo importante. Lo bueno del yoga, además, es que no existe la competición, se trata de una cita con nosotros mismos.

Si hace unos meses he vuelto a practicar el hatha yoga con un placer inmenso, paralelamente, realizando un reportaje, he descubierto otra disciplina que desconocía por completo, el yoga nidra.

El yoga nidra se práctica en postura de Shavasana, llamada también la postura del cadáver. Se puede realizar en el suelo o en la cama. El cuerpo alcanza una relajación profunda y lo único que “trabaja” es la mente. La ventaja de esta práctica es que no tiene contraindicaciones. No se realiza ningún movimiento, sin embargo, el bienestar que se consigue es maravilloso.

Para comprender mejor todas sus ventajas, tuve el placer de charlar con Conchi Sánchez, profesora de yoga y meditación certificada por la Unión Europea de Yoga y la AEPY (Asociación Española de Practicantes de Yoga), e instructora de yoga nidra avalada por la Embajada de la India.

¿En qué consiste el yoga nidra?

El yoga nidra es un estado de relajación profundo en el que el cuerpo permanece inmóvil en una esterilla, en el suelo, en un sofá o en la cama; lo puedes practicar en casa siempre y cuando tengas un audio que te guíe. Este tipo de yoga es una técnica de meditación. Sin embargo, a veces los conceptos de relajación y de meditación se confunden, por eso hablamos de relajación profunda, en este caso. Nidra significa sueño consciente, es decir, que nos vamos a situar en un espacio que está entre la vigilia y el sueño. Vamos a tener a veces la sensación que nos vamos al sueño y otras veces nos sentiremos en plena consciencia. Según nuestro nivel de práctica, llegaremos a este estado de nidra que es el que se busca. Al principio es muy fácil irnos al sueño porque el cuerpo está muy condicionado, y solo nos tumbamos y cerramos los ojos para irnos a dormir.

¿Hay un horario más aconsejable para esta práctica teniendo en cuenta este “riesgo”?

Es mejor realizarla cuando no estamos demasiado cansados, ni tampoco con el estómago lleno. Podemos hacer una práctica por la mañana en ayunas o habiendo desayunado ligero, o bien por la tarde. Para la gente que tiene dificultades para relajarse o desconectar de su trabajo, llevándose los problemas a la cama, viene bien hacer una práctica antes de acostarse.

Si se trata de un sueño consciente, ¿no nos vamos a quedar dormidos si practicamos por la mañana?

Para nada. A nivel energético, vamos a renovarnos y a revitalizarnos internamente. Lo que estamos haciendo, hablando del cuerpo físico que es una máquina perfecta, es dejarlo en reposo. Después de cualquier práctica de yoga, y eso incluye el nidra también, vamos a sentir que recuperamos energía. No nos vamos a mantener cansados tras una sesión.

“Nidra significa sueño consciente, es decir, que nos vamos a situar en un espacio que está entre la vigilia y el sueño”

Entiendo que eso nos ayuda a relajar no solo el cuerpo sino la mente también. ¿Puede ayudar a llevar mejor situaciones de estrés, de ansiedad?

Totalmente. La práctica del yoga en sí no solo actúa sobre el plano físico, una práctica de hatha yoga. También sobre planos respiratorios, energéticos, el mental y el psíquico. El nidra es una técnica de meditación y cualquier método de meditación va a calmar, a purificar el estado mental. Al entrar en una fase meditativa de nidra, vamos a sentir que no solo hemos descansado al estar tumbados sino que nuestra mente se ha limpiado, ha eliminado contenido, las emociones se han tranquilizado, normalizado.

Existen muchas formas de meditar. El yoga nidra es una meditación guiada y no hay que vaciar la mente como en otras ocasiones, sino que tenemos que seguir las indicaciones que nos da la voz que nos dirige. ¿Es así?

Lo que tenemos que hacer es confiar en la voz que nos guía. Lo primero que va a hacer es relajar nuestro cuerpo, que es un vehículo. Lo que se intenta con la primera relajación es estar lo más tranquilo y cómodo posible. Porque si nos quedamos solo en las sensaciones del cuerpo físico, no vamos a poder trascender esta parte tangible. Con el nidra, lo que buscamos es ir más allá de eso. Para conectar con el cuerpo sutil y la parte esencial o la parte espiritual, tenemos que olvidarnos un poco de este cuerpo. Luego viene la rotación de consciencia para que la mente se estabilice en un estado diferente, que no racional. No tenemos que hacer ningún esfuerzo, simplemente escuchar la voz que nos llevará a dónde nos tiene que llevar. Y confiar en que nuestra consciencia se establecerá dónde se tiene que establecer. Existen diferentes tipos de prácticas de yoga nidra que pueden trabajar más la visualización u otros tipos de percepciones. No requiere ningún esfuerzo por nuestra parte.

“El yoga nidra es un profundo estado de relajación”

¿Por qué las visualizaciones son tan importantes?

Aportan un descondicionamiento en la mente que funciona siempre de la misma manera, estando en la planificación, en la resolución de problemas. De esta manera creamos otro espacio diferente al que conocemos. Allí aparece la intuición, la creatividad, donde nos conectamos con una parte nuestra que siempre está pero la mantenemos callada. De alguna manera, hace brotar de nosotros esta energía y así descansan los receptores sensoriales, porque la mirada está activa cuando hay una visualización, sin embargo, el tacto no lo es, ni tampoco el juicio crítico. Estamos simplemente en la creación.

Estas voces que nos guían tienen entonaciones muy especiales, al utilizar la palabra cuerpo, por ejemplo. ¿Me lo puedes explicar?

A través de la voz, de su vibración y de la entonación, vamos guiando para conectar con ondas distintas que son las que alcanzamos durante el estado de sueño. No solo guiamos a través del contenido sino también a través de la calidad, del tono de la voz, de las pausas que son muy importantes cuando dejamos silencios. Eso permite acompañar a la persona para inducir este estado de meditación, de concentración, de meditación profunda.

“El yoga nidra no va a curar una enfermedad”

¿Por qué baja tanto la temperatura del cuerpo? Más de una vez me he quedado helada y si debería dar un solo consejo es no olvidar nunca taparse y mucho.

Baja muchísimo. Cuando el cuerpo se relaja, siempre baja la temperatura corporal porque se queda en reposo. El sistema cardiovascular y el metabólico también descienden. Aunque nos tumbamos, pensamos que no vamos bien abrigados porque no sentimos frío en este momento, siempre hay que taparse porque vamos a tener frío durante la práctica, tanto en invierno como en verano. Es aconsejable tener mantas a mano porque si notamos la sensación de frío, es imposible conseguir el estado de nidra.

¿No es malo para la salud que baje tanto la temperatura?

No porque baja cuando dormimos, cuando se relaja el sistema nervioso.

No nos damos verdaderamente cuenta… quizá porque no sabemos relajarnos…

Cuando nos tumbamos, es para dormir y nos arropamos. De hecho, si duermes una siesta y no te tapas, te levantas helado.

Para familiarizarse con el yoga nidra, al menos las primeras veces, es mejor acudir a un centro especializado, ¿verdad?

Al principio sería aconsejable buscar un centro con un instructor de yoga nidra que pueda ir guiando. Luego lo puedes hacer en casa con un audio. Depende también de hacia dónde orientes tu práctica, si lo orientas a un grupo general o de manera terapéutica.

El yoga nidra permite alcanzar un estado de bienestar, no cura nada. Lo digo porque en la práctica tenemos que repetir una intención (cada uno la suya) que se llama el sankalpa. Vivimos en una sociedad en la que unos intentan aprovecharse de los más débiles y el sankalpa puede ser la herramienta perfecta para personas sin escrúpulos.

La intención que cada profesional tenga es imposible de saber. Desde luego, no vas a curar una enfermedad con este tipo de práctica. Nosotros somos un conjunto de envolturas; no solo somos lo que vemos. Aparte de la dimensión del cuerpo físico, como te comentaba, tenemos una parte emocional, espiritual, energética o como la queramos llamar, y psíquica y mental. No lo vemos pero podemos percibirlo según nuestro nivel de práctica. Estas capas que en yoga se llaman koshas están interrelacionadas y la salud de una afecta a la otra. Cuando hay una enfermedad que se manifiesta en el cuerpo físico, también se revela en el cuerpo energético, en el plano emocional, mental y psíquico de esta persona. Cuando hago un trabajo de yoga nidra, además de beneficiarme de un descanso de mi mente, de mi atención, de mi cuerpo, también afecta a envolturas más sutiles. El yoga nidra no va a curar una enfermedad que es lo primero que se debe tratar. Pero no deberíamos olvidar tratar por igual todas las partes, porque va a beneficiar al conjunto de la persona. La medicina está muy evolucionada pero llega hasta donde llega.

¿Me puedes hablar un poco del sankalpa que debemos repetir tres veces por la mañana y por la noche?

El sankalpa sería la intención que queremos potenciar. No tiene sentido si no lo sentimos, si no introducimos este propósito de creencia de energía. Aporta un conocimiento nuevo de ti mismo y de hasta dónde quieres dirigir este deseo.

Me resulta apasionante esta práctica, muy alejada de la meditación tradicional que se nos suele proponer.

Es una práctica que ayuda a que no aparezcan preocupaciones que están en la mente y eso es porque estás guiada en todo momento. La práctica de nidra es tu elección, puedes permitir hacer una rotación de consciencia o no. Nadie te está diciendo “deja la mente en blanco”. Además, ¿cómo se hace esto? Aquí te decimos lo que tienes que relajar, visualizar y cuándo.

Dejar la mente en blanco asusta a muchos. Además, es muy difícil de alcanzar…

Dejar la mente en blanco es casi imposible… La mente está estructurada para hacer análisis constante.

El yoga nidra en unos pasos

Tras tumbarse y taparse, nos quedamos físicamente inmóviles durante toda la sesión. Si es muy complicado, siempre que nos movamos, debemos hacerlo en plena consciencia, es decir acompañar el gesto con la mente y no moverse de manera automática. Si el cuerpo se va a quedar dormido, la mente va a seguir muy despierta, atenta a cada palabra pronunciada. Es un trabajo de escucha en plena lucidez pero no de pensamiento. La práctica al comienzo consiste en alcanzar un estado de relajación absoluto sintiendo que se abandona cada parte del cuerpo. Tomamos varias respiraciones hasta que la voz nos indique el comienzo de la rotación de consciencia. Se basa en enfocarnos en todas las partes del cuerpo, una tras otra y repetirlas en silencio una vez escuchadas. Al acabar esta parte, se empezarán ejercicios de visualización, de respiración, etc. El sankalpa se pronuncia al principio de la práctica y al final. Las sesiones pueden durar unos minutos o más de una hora dependiendo del nivel.

De dónde proviene el yoga nidra

El yoga nidra proviene de la práctica tántrica de Nyasa en la India. El tantra es un conocimiento del amor profundo y de todo lo que hacemos en cada momento que parta desde la energía del amor. El Nyasa dentro del tantra es el manejar del mundo energético y de allí nace la práctica de nidra. El Nyasa es sentir la energía y volverse uno con ella, porque también somos esta parte aunque nos conectemos más con la parte densa, materia de nuestro ser. Sería como programar esta energía desde nuestro interior con el fin de potenciar y conectar con esta parte esencial que somos. La cultura occidental no tiene nada que ver con la cultura oriental, y no nos lleva por este camino. La sociedad nos empuja a dar siempre más de sí, tener más labores. Sin embargo, es esencial volver a conectar con nuestra propia energía y el yoga nidra es la forma ideal de conseguirlo.